El chocolate se obtiene de la cocoa, que es rico en antioxidantes. Las flavonoides son los que le dan el poder antioxidante al chocolate, según investigaciones muestran que estos tienen influencias potenciales sobre la salud vascular, tales como la reducción de la presión arterial, mejorar el flujo sanguíneo hacia el cerebro y el corazón.

El chocolate amargo es el que contiene este poder antioxidante, ya que el chocolate de leche está altamente procesado y pierde estas propiedades.

Una forma deliciosa de consumir este alimentos y de potencializar sus efectos es con el consumo de fruta, ya que estas también tienen niveles elevados de antioxidantes que favorecen la salud cardiovascular.

Solamente coloca el chocolate en baño maría, después baña las fresas y están listas para que las consumas.